Siempre que miramos una fotografía realizamos un exhaustivo recorrido a través de todos sus elementos y en un orden determinado. Este recorrido se conoce como “lectura visual” de las imágenes. Cuanto más rápido y fácil sea esta lectura, más eficaz es el proceso de interpretación de la imagen y, por consiguiente, mejor se traslada el mensaje.

Una buena lectura visual se consigue con una óptima composición y la idónea selección de los elementos del encuadre.

Por otro lado, hay que tener bien definido cuál es el motivo de la escena, es decir, dónde reside el mensaje principal. A partir de ahí, el fotógrafo preparará el resto de los elementos secundarios y complementarios que conformarán el contexto.

Durante este proceso, descartaremos lo que no es necesario: objetos que distraigan la atención o incluso molesten o interfieran en la lectura visual, lo que llamamos “ruido visual” de la escena. Si, además, se aplica el concepto “menos es más“, el fotógrafo conseguirá “escribir” mejor sus fotografías.

Por esta razón, el conjunto no debe sobrecargarse y tampoco hay que pretender mostrarlo todo en una sola imagen. Para esto, pueden tomarse otros puntos de vista y encuadres que, posteriormente, servirán para elegir las mejores opciones de cada espacio.

Este texto es un extracto literal del Manual de Estilo Fotográfico de Barceló Hotels & Resorts, reconocida empresa hotelera mundial que en este mismo manual se refiere a sus imágenes literalmente como: “la herramienta de ventas y comunicación más importante que dispone”.

Al igual que Barceló, Info Channel comprende la importancia de la planeación de la comunicación, y el diseño de la manera de comunicar cada mensaje para que logre el objetivo para el cual fue concebido.

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